BÍA

Bía era en la mitología griega la personificación femenina de la fuerza y la violencia. Junto a su hermano Cratos (Poder) era la guardiana de Zeus. Junto a ellos se alinearon sus otros dos hermanos Zelo (Rivalidad y Discordia) y Nike (Victoria), y sus padres, el titán Palas y la oceánida Estigia (diosa del inframundo, personificación del Odio), para participar en la lucha de los dioses contra los Titanes de la que los dioses salieron victoriosos. Los cuatro hermanos alados (violencia, poder, discordia y victoria) se hicieron imprescindibles para Zeus quien les encomendó la tarea de hacer cumplir sus órdenes cada vez que lo necesitara. Cuando Zeus decidió castigar a Prometeo por robar el fuego para entregárselo a los hombres, ordenó que fuese encadenara a una roca en las montañas del Cáucaso. Bía y su hermano Cratos fueron los encargados de hacer cumplir el castigo, pero Bía era la única con la fuerza suficiente como para detener al titán Prometeo. Ella fue quien le ató a una roca con cadenas irrompibles. Allí se cumplió la sentencia de Zeus. Cada día, un águila sacaba el hígado de Prometeo y se lo comía delante de él. Cada noche, su hígado volvía a aparecer en su sitio y el ciclo comenzaba nuevamente, convirtiendo el castigo de Prometeo en un perpetuo tormento.
Plutarco, en su “Vida de Temístocles” cuenta que cuando el general ateniense exigió dinero a los andrios (de la isla Andros en el Egeo) y estos se negaron (según Heródoto fueron los primeros que se negaron a pagar este tributo), el ateniense hizo ver su exigencia haciéndose acompañar de las diosas Peitho (Persuasión) y Bía (Fuerza). Si no lo conseguía con la primera, haría actuar a la segunda. Los andrios le respondieron que ellos se negaban a darle el dinero amparándose en otras diosas: Penia (Penuria), Aporia (Impotencia), Amekhania (Desamparo) y Ptokhenia (Mendicidad).
Bía, es mencionada por Heródoto, Hesíodo, Pseudo-Apolodoro, Esquilo, Platón, Pausanías y Plutarco, pero nunca se le hace decir una palabra. La violencia es muda. Su templo estaba en Corinto donde se la adoraba, significativamente, junto a Némesis (la venganza).
AlmaLeonor_LP