RESURRECCIÓN

No puede actuarse en la historia lo que es antihistórico, lo que es la negación de la historia. 0 la resurrección de la carne o la inmortalidad del alma, o el verbo o la letra, o el Evangelio o la Biblia. La historia es enterrar muertos para vivir de ellos. Son los muertos los que nos rigen en la historia, y el Dios del Cristo no es Dios de muertos, sino de vivos. El puro cristianismo, el cristianismo evangélico, quiere buscar la vida eterna fuera de la historia, y se encuentra con el silencio del universo, que aterraba a Pascal, cuya vida fue agonía cristiana. Y en tanto la historia es el pensamiento de Dios en la tierra de los hombres.
MIGUEL DE UNAMUNO
«La Agonía del Cristianismo» (1938)