AVATAR: EL SENTIDO DEL AGUA Y LA AMRITA

AVATAR: EL SENTIDO DEL AGUA Y LA AMRITA

Si ya han visto AVATAR: EL SENTIDO DEL AGUA (2022, James Cameron), recordaran que los humanos que llegan a Pandora justifican la caza de los Tulkun, esa especie de enormes cetáceos que los Metkayina, la gente del arrecife, consideran su familia espiritual, por la obtención de la AMRITA, unas encimas que albergan en su cerebro y que les hace tan inteligentes y especiales. Ese elemento es utilizado por los hombres para alargar su vida… Se pagan millones por ello. La dosis producida por un solo Tulkun cuesta unos 80 millones de dólares. De ahí su caza indiscriminada.

¡¡YO CONOZCO ESA PALABRA!! No sé a cuantas personas les pudo pasar lo mismo que a mí, pero desde luego, y aunque hace mucho de esas clases y si es que han visto la película, a todos mis compañeros de la asignatura de TIEMPO Y MITO EN LA INDIA y a su profesor Enrique Gavilán, de la Universidad de Valladolid, seguro que sí. Yo casi salté del asiento al escuchar esa palabra, AMRITA.

Amrta es una expresión en sánscrito que signitica literalmente «sin mierte». Suele traducirse por néctar y hace referencia a la Bebida de los Dioses, la que les proporciona la inmortalidad (también conocida más tarde como Soma). Así que, como casi todo en esta película (en las dos, Avatar, del 2009 y en esta del 2022), ese término no surgió de la nada ni fue un invento de los guionistas, es una referencia a los textos postvédicos, a las Epopeyas indias del siglo III a. C., los Smrti, lo recordado (en contraposición a lo escuchado o Sruti de los Vedas).

Como ha explicado varias veces su director, James Cameron, los referentes de sus películas son universales: la ecología frente al avance tecnológico, la necesidad de materias primas frente a la destrucción de hábitat, el enfrentamiento entre civilizaciones, religiosidad y espiritualismo, libertad frente a colonización, el mito del héroe que se pone del lado del oprimido, una historia de amor entre seres de distinta naturaleza… También ha confesado una marcada inspiración de otras culturas, como la micronesia y como ya dijo ya en el 2010, la propia historia de colonizción americana sobre los nativos lakotas (lo que no ha evitado que le interpusieran varias denuncias por plagio que ha sorteado a su favor, y más de una llamada de boicot). Otro ejemplo lo encontramos en el idioma de los Na’vi, que fue creado por el lingüista Paul Frommer junto al propio Cameron, y está basado en los dialectos polinesios y expresiones de idiomas como el amhárico de Etiopía y el maorí, de Nueva Zelanda. Y, por supuesto, contó con referentes cinematográficos, desde La Selva Esmeralda (1985, John Boorman)  a Bailando con Lobos (1990, Kevin Costner) o La princesa Mononoke (1997, Hayao Miyazaki), según el propio Cameron. Aunque es fácil vislumbrar también influencias de sus propias películas anteriores: Titanic (1997), Aliens (1986), The Abyss (1989), Terminator (1984) y Terminator 2: Judgment Day (1991), entre otras cosas, por la presencia de potentes heroínas femeninas. Como Neytiri en esta segunda película de la saga.

Imagen: Avatar Wiki

Siguiendo con esas influencias, la misma palabra AVATAR es de origen hindú y el director ha explicado muchas veces que siente debilidad por las divinidades indias. Él utilizó esa expresión porque, dijo, «es la encarnación de uno de los dioses hinduistas en forma humana». Ese significado cuadraba muy bien con lo que quería hacer en la película, un cuerpo biológico (alienígena Na’vi) en el que se inyectaba, merced a una avanzada tecnología, una conciencia humana. No exactamente la inmortalidad, pero casi. En Avatar: El sentido del agua, se habla de ello y ahora literalmente: las enzimas del cerebro de los Tulkun, la AMRITA, pueden proporcionarla en cierto modo. Es un remedio contra la vejez.

EN LA MITOLOGÍA INDIA

En la Epopeya india del Mahâbhârata (siglo III a. C.),  la Amrta surge en la creación del mundo, tal y como se explica en el Samudra manthan, el MITO DE LA BATIDA DEL OCÉANO DE LECHE, la gran batalla entre Dioses (deva o sura) y Demonios (asura) por obtener la inmortalidad (Amrta) inmersa en el océano. ¡No me digan que no hay paralelismos!

Básicamente, el mito viene a contar que Dioses (Devas) y Asuras (No-dioses, asimilado a «demonios») se ven abocados a colaboran para hacerse con la bebida que les proporcionará la inmortalidad. Deben hacerlo para «batir el océano» (que es agua primigenia). Lo curioso es que los «No-Dioses», los Asuras, son unos personajes muy complejos en la India. Dios se dice con la palabra SURA, por lo tanto, lo contrario sería A-SURA. Pero Asura significa literalmente «lo que Brilla», manifestando así a una identidad confusa en la que sabemos muy bien donde está la luz (que se supone atribuida a los Dioses) y donde la oscuridad (identificada con los demonios Asuras). Una de las teorías que explican esta dualidad es que, en una fase anterior a la VÉDICA, los «Buenos» eran los Asuras, no los Dioses. La mitología india tiene muchas de estas contradicciones y dualidades.

Siguiendo con el mito, el Batidor es la Montaña Mandara, que ha sido arrancada de su sitio por una serpiente. Las serpientes son muy veneradas en La India, junto a las aves, por ser todos ellos «dos veces nacidos», primero el huevo y luego el ser. También los Brahmanes, que nacen una segunda vez tras alcanzar la sabiduría. Y así, la cuerda que mueve el Batidor es otra serpiente, Vâsuki. En el texto del Mahâbhârata, Dioses y Asuras van a colaborar para realizar la batida. Sin embargo, serán los Asuras quienes agarren a la «Serpiente-Batidor» por la cabeza (la parte noble) y los Dioses quienes la agarren por la cola, evidenciando más aún la complejidad de este texto y de esos personajes.

Imagen: Giulio Ferrario (1820)

El recipiente de la batida es la tortuga Akupara, que contiene el Océano, que primero es agua y conforme se va batiendo con la Montaña Mandara, los elementos de esta (arboles, animales, minerales, etc.) se van desprendiendo y al ser batidos forman leche (Kshīra Sagara). Cuando esta leche se sigue batiendo y tras miles y miles de años de esfuerzos, es cuando se forma la Mantequilla Líquida. Será de esta de donde surge el Sol, la Luna (Chandra), y un variado número de objetos extraordinarios y seres maravillosos: la vaca de la abundancia, Surabhí, fuente perpetua de leche y mantequilla, proveedora de todas las necesidades; Vārunī, la diosa del vino, que hace rodar los ojos; Pariyata, el árbol del paraíso de Indra, que perfumaba el mundo con la fragancia de sus flores y Kalpavriskha, un árbol que cumpliría cualquier deseo (siempre hay árboles sagrados en todas las religiones y mitologías); Uchaisravas, el caballo blanco, ancestro de todos los caballos, cuyas siete bocas simbolizan los colores del arco iris; Airavata, el elefante blanco sobre el que montaba el dios Indra; Alaksmí, la diosa del infortunio y la fealdad junto a Laksmí (Sri), la diosa de la belleza y de la fortuna, sentada sobre un loto; las apsaras, o ninfas celestes…

Shivá (azul) bebiendo el veneno Kâlakûta.

Y también, al seguir batiendo, aparecerá un Veneno (Kâlakûta, que significa «punta de la muerte»). El problema de todo ritual, es que, junto al beneficio que proporciona, produce una parte peligrosa (en este rito es este veneno) que debe ser absorbida por alguien. En un rito cristiano ese peligro es absorbido por el sacerdote, en el texto indio lo hace Shivá en forma de canto. Es una formula llena de significados, entre otras cosas es por este motivo por el que se representa a este dios, Shivá, dios supremo de la India, el tercero de la trilogía hinduista, junto a Brahmā y Vishnú, con la garganta manchada de color AZUL y se le conoce (entre otros nombres, tiene 1008 registrados) por Nila Kantha (Garganta Azul).

Hay muchas representaciones de este dios hindú en las que aparece con todo su cuerpo azul, como los Na’vi de Cameron. ¿Se está refiriendo a que son Dioses? Posiblemente, dada su afición a la mitología india. Y, tal vez, quisiera mostrar a los Na’vi como seres superiores en espiritualidad a los humanos venidos «de lo alto», quizá como Dioses. Pero según ha contado el director, el aspecto de los Na’vi, está inspirado en un sueño que tuvo su madre, que imaginó que «unas criaturas azules de más de 3,5 metros podrían ser muy atractivas». El primer esbozo de esas criaturas de Pandora (por cierto, una palabra de la mitología griega, con connotaciones en otras culturas anteriores), fue creado entre 1976/77.

Y, por último, del océano batido y convertido en blanca Mantequilla Líquida, surge la AMRTA, el néctar de inmortalidad, portada en una jarra (kumbhá) por Dhanuan Tari, el médico de los Dioses. Después, de esta colaboración inusual, seguirá una batalla en la que se enfrentan Dioses y Asuras por conseguirla y donde los demonios van a ser momentáneamente derrotados. Es decir, este mito nos cuenta que los Dioses no poseen la inmortalidad, la Amrta, tienen que ganársela y pelearán por ella con los demonios o Asuras.

Dhanwan Tari representado como avatar de Vishnú con cuatro manos, que sostienen el disco Súdarshana, una flor de loto, una caracola y el pote de amrita (néctar de la inmortalidad).

Llevando esta idea al argumento de la película, ni los hombres ni los Na’vi poseen la inmortalidad, solo la conservan en su interior unos seres surgidos del océano, los Tulkun (y no para ellos, es un efecto que puede originarse en los hombres) y ambos lucharan por ella. Los Na’vi uniéndose a ellos como su hermano espiritual, los hombres, extrayendo las enzimas de su cerebro tras acabar con su vida. Dioses y Asuras. Demonios que una vez fueron buenos, mejores que los dioses, todo antes de pensar que podían hacerse con el don de prolongar la vida.

EL MITO EN OTROS TEXTOS

La complejidad del texto postvédico viene dada por muchas cuestiones. La primera es que la disposición de los acontecimientos sigue el siguiente orden: en un principio inicio, las aguas están TRANQUILAS; luego, durante la batida del océano, se produce el desorden, el CAOS; y finalmente, se establece el ORDEN, un cosmos, la creación del mundo. Casi, casi, la misma estructura que se utiliza para una novela o una película. Los tres tiempos de la vida y del mundo.

Este mito se interpreta también como el Surgimiento de los Pares Opuestos, conflictos creativos que marcan la visión de La India sobre la dualidad y los pares. Se manifiesta en que todos los elementos están duplicados (aunque no aparece en el resumen que he puesto, hay dos montes, además de Mandara, el monte Meru… Y, recuerden, dos serpientes, DiosesAsuras…) y, además, en que, del batido, salen CUATRO LIQUIDOS, un veneno (Kâlakûta) y tres elixires: Leche, el alimento de los hombres; Mantequilla Líquida, el alimento de los ritos; y la Amrta, la bebida de la inmortalidad y que será el alimento de los dioses.

Kaśyapa y su esposa Aditi.

La Amrta también aparece en otra Epopeya, el Râmâyana. Aquí, el mito dice que Dioses y Asuras son hermanos, hijos del mismo padre, pero de distinta madre. El padre es Kasyapa, quien con su esposa Aditi tiene a sus hijos los Âditya (o Asuras), y con su esposa Diti tiene a sus otros hijos, los (Daityas o Dioses). El veneno Kâlakûta surge de la serpiente Vâsuki (de la parte que sujetan los Asuras) en lugar del océano, pero también es absorbido por Shivá por ser el dios más poderoso. Y, finalmente, en esta Epopeya aparece una mujer, Surâ, que está identificada con el licor de la inmortalidad.

Una mujer también es el elemento esencial en otra versión del mito, la que aparece en los Purâna (siglo X d. C.), Epopeyas no heroicas como las anteriores, generalmente considerados como mitos «de lo antiguo», tal vez narradoras de hechos semihistóricos pretéritos. En esta versión el enfrentamiento entre Dioses y Asuras es anterior a la batida, es decir, llegan a ella ya como enemigos. Y, además, los Asuras cuentan con una ventaja, son aliados de Sukra (Venus), un gurú que conoce la fórmula para resucitar a los muertos, y consiguen de este modo, superar a los Dioses en los conflictos. ¿Y para qué van a querer hacerse con la inmortalidad teniendo esta ventaja? Se preguntarán… Pues porque así es la naturaleza de estos seres, tan parecida a la de los humanos, a fin y al cabo, sus creaciones. Y es que, en toda mitología y religión, son los Dioses (devas), quienes deben vencer. Cuando consiguen la Amrta, son seres inmortales e invencibles y arrojarán a los Asuras a los infiernos.  Es de lo que se trata… ¿No?

Narasinja, un avatar del dios hindú Visnú dando muerte a un Daitya.

Aquí, en los Purâna los Dioses van a emplear un engaño para superar a los Asuras y conseguir así la Amrta surgida de la batida del océano. Este engaño va a estar ocasionado por una mujer, Mojiní un avatar del dios Visnú, la mujer más bella del mundo. Por eso decía que es el elemento esencial en este mito. Ella seducirá a los Asuras y se olvidarán de la bebida inmortal. Ya de antiguo, hasta un dios como Visnú sabía que una mujer podía más que dos carretas… En los sucesivos relatos de los Purâna esta mujer va a ser asimilada a la diosa Laks, y acabará, con el tiempo, sustituyendo en importancia a la Amrta.

Mojini con una jarra de Amrta.

INTERPRETACIONES DEL MITO

El mito de La Batida del Océano de Leche, es uno de los más conocidos y celebrados en La India. La tradición cuenta que después de que los Dioses obtuvieran la victoria en la batida, cuando apareció Dhanuan Tari con el kumbhá (la jarra que contenía el Amrta), los Asuras se lo arrebataron y huyeron lejos, perseguidos por los Dioses. Durante doce días y doce noches divinas (el equivalente a 12 años humanos, un número que también se repite constantemente en ritos y celebraciones del solsticio de invierno y Navidad, el Dodekaimeron, como se explicó en HELICÓN, por ejemplo en PERSONAJES NAVIDEÑOS: KALLIKANTZAROS  o los doce días de LOS JÓLASVEINAR, pero hay más), ambos combatieron en el cielo por la posesión del cántaro o jarra de Amrta. Y entonces, durante esa pugna, algunas gotas de Amrta cayeron sobre la Tierra depositándose en cuatro lugares otorgándoles así inmortalidad sobre lo terrenal.

Puentes artificiales sobre el Ganges para los peregrinos del kumbhamela.

Son lugares sagrados y en cada uno de ellos se celebra una fiesta anual para conmemorarlo: Nasik, Haridwar, Ujjain y, sobre todo, en Prayagraj (Allahabhad), en Uttar Pradesh, donde cada 12 años (de nuevo la docena), es cuando según la astrología védica (jyotish), Júpiter (Brhaspati), que tarda ese tiempo en completar su traslación, entra en la constelación de Tauro (kumbha) y el Sol y la Luna en Capricornio, durante el mes hindú de Magha (enero-febrero). Entonces se celebra una multitudinaria festividad, la de Mahâ Kumba Mela, Kumbhamela o «Fiesta de Jarra».

El planeta Pandora de Avatar.

Un inciso antes de seguir. ¿Recuerdan el nombre del planeta de los Na’vi? Sí, Pandora. Según la mitología griega, era el nombre de la primera mujer, creada por Hefesto, dios del fuego, por orden de Zeus, en un momento muy especial, después de que mortales e inmortales se separaran tras el engaño de Prometeo… Bueno, el caso es que Pandora fue  la responsable de abrir una extraña caja, que en griego original venía a ser una jarra. Sí, una jarra, como la que guardaba la Amrta. Y esta caja-jarra albergaba todos los males existentes y que acabó liberando en el  mundo, incluido un don, que permanecía en el fondo… La esperanza. ¿Quizá la inmortalidad? ¿Un recordatorio de que mortales e inmortales solo estaban separados por el afán de dispersar el mal en el mundo? ¿Esos males son el fruto de la lucha entre Dioses y Demonios por obtener la inmortalidad? Pandora terminó siendo, por orden de Zeus, un «bello mal» (una dadora de desgracias a la humanidad, como la Eva del Paraíso, en este caso por robar un fruto prohibido que se ha asimilado a la sabiduría… De nuevo ¿la inmortalidad?), un don que los hombres (y hasta los Asuras, recuerden a la bella Mojini que acabo de mencionar) recibieran con tanto agrado que se olvidarían de que, en realidad, aceptaban un sinnúmero de desgracias.

Como los terrícolas que acuden al planeta Pandora de los Na’vi, pensando en sus beneficios, sin comprender que la desgracia del fin de su propio planeta Tierra viene con ellos: la destrucción de su hábitat, todos los males del mundo.

Kumbhamela de Allahabhad en el 2001.

Volviendo a La India, y a la historia de las gotas de Amrta caídas a la tierra, la ciudad de Allahabhad se halla en la confluencia de los ríos Ganges, Yamunâ y Sarasvatî, llamado el «Río Invisible», porque es subterráneo y se supone surge en este punto. Con la fiesta celebrada aquí cada 12 años (en esta ciudad entre enero y febrero, con la luna nueva, como otro rito de invierno) toda el agua de la confluencia de los ríos se vuelve sagrada, es toda ella Amrta y quien se bañe en esa Inmortalidad, queda liberado.

Cada doce años, India entera se estremece; los pueblos se agitan, los monasterios se vacían, de las cuevas del Himalaya descienden ermitaños desnudos sucios de cenizas, de la costa de Malabar, del cabo Comorín, del golfo de Bengala, de los montes Vindhya, del desierto del Thar convergen carros de toda clase, comitivas de monjes, grupos de indigentes, tropas de leprosos, séquitos de rajás, palanquines abarrotados de mujeres ocultas por cortinas blancas, trenes llenos de pasajeros, una muchedumbre extraordinaria ávida de santidad: los peregrinos de la Kumbh-Mela.

Mircea Eliade, La India ( 1997)

Unn santón bebiendo agua del Ganges (convertida en Amrta) en el mismo recipiente que Shiva.

En esta fiesta de Kumbhamela  se dan cita millones de personas y está considerada la mayor concentración humana de la Tierra. Sobre el Ganges se tienden 18 puentes flotantes que facilitan el acceso de los millones de devotos que asisten al festival. En el año 2001 se calculó una asistencia de 70 millones de almas. En el 2013 duró 55 días y se estimó una afluencia de 100 millones de personas. El  domingo 10 de febrero, considerado el día más favorable, 30 millones de personas descendieron a Allahabad para bañarse en la confluencia de los tres ríos y en la estación ferroviaria se produjo una estampida en la que fallecieron 42 personas y resultaron heridas más de 300. Y eso que las autoridades destinaron en la ciudad una fuerza policial y paramilitar de 14.000 hombres dedicados a la protección de la multitud. A pesar del frío (por la noche se podían alcanzar los cero grados), el hacinamiento y que el agua está contaminada, los peregrinos aseguran que regresan a sus casas sintiéndose mucho mejor que cuando llegaron. Están convencidos de que las aguas contienen Amrta, el néctar de la inmortalidad.

Pero quizá haya otra explicación. En el siglo XIX Émile Durkheim acuñó una expresión para este fenómeno: «efervescencia colectiva». Durkheim afirmaba que esa enorme confluencia de gentes tenía un impacto positivo en la salud de los individuos, que sería imposible entenderla en solitario porque en este tipo de manifestaciones multitudinarias cada uno transmite fuerza al otro. ¿No les suena a la comunión que se produce en Pandora de todos los seres con el Arbol Espiritual?

El Árbol Espiritual de Pandora que conecta a todos los seres vivos entre sí.

En nuestros días, el psicólogo Stephen Reicher, de la Universidad de Saint Andrews (Escocia), estudió también este acontecimiento llegando a concluir que «la pertenencia a un colectivo es crucial para la sociedad, nos ayuda a consolidar el sentimiento de quiénes somos, a forjar nuestras relaciones con los demás e incluso a determinar nuestro bienestar físico». Nick Hopkins, de la Universidad de Dundee (Escocia), vio en esta manifestación un alarde de relación interpersonal compartida en la que «uno deja de percibir a las personas como seres ajenos para verlas de manera más íntima». Se da y se recibe apoyo, la rivalidad se transforma en colaboración y la gente es capaz de conseguir sus objetivos mucho mejor de lo que lo haría nunca en solitario. Esto engendra emociones positivas que nos vuelven no solo más fuertes ante las dificultades, sino también más saludables. Son menos propensas a morir por una dolencia cardíaca y a contraer ciertos cánceres y hay indicios de que son menos vulnerables a la degeneración cognitiva relacionada con el envejecimiento. Se explica en un amplio reportaje del National Geogrphic en marzo del 2014. Las implicaciones son fascinantes. ¿Será cierto que al beber las aguas del Ganges reciben su dosis de inmortalidad? ¿Será la inmortalidad el fruto de la interacción humana en sociedad, en grupos de afinidad común y no una bebida sagrada?

Finalmente, según declaraciones del psicólogo Mark Levine de la Universidad de Exeter (Inglaterra), «pertenecer a un ente colectivo puede cambiar nuestra forma de ver el mundo», algo que ya se había afirmado sobre el lenguaje, al fin y al cabo, la expresión más genuina de pertenencia a una comunidad; y Dirk Helbing, de la Escuela Politécnica Federal de Zúrich, lo certifica diciendo que «existe una imperiosa fuerza social que nos impulsa a convivir». Ya lo decía Aristóteles en el siglo IV a. C.: el hombre es un ser social por naturaleza.

Lo que sucede en la fiesta de Kumbhamela puede interpretarse de muchas formas, puede llamar la atención o repeler, puede tener múltiples lecturas, pero en todo caso, no nos puede dejar indiferentes. La siguiente Kumbhamela se celebrará en el año 2025, por si sienten curiosidad. Pero si tienen oportunidad, antes vean el episodio que el periodista y viajero Simon Reeve grabó sobre el río sagrado de La India, el Ganges.

Reunión de la gente del bosque, los Omaticaya, con la gente del arrecife, los Metkayina.

Y, finalmente, no sé si lo verán ustedes así, pero a mí me parece que toda la película de Avatar: el sentido del agua, se basa en esta premisa. Una unión espiritual de todos los habitantes del planeta Pandora, tanto de Na’vis, como de otras criaturas, por ejemplo, los Tulkun o de la exuberante flora del planeta, como el Árbol Espiritual de los Metkayina. Se necesitan y se apoyan entre ellos como los miembros de cada comunidad, los Omaticaya y los Metkayina, entre sí, y que al final colaboran y se sienten miembros de una misma unidad, los habitantes de Pandora, como si de una misma familia se tratase. Como la que forma el protagonista, Jake Sully con Neytiri y sus hijos. Así, al menos lo declaró Sigourney Weaver: «La historia es sobre la familia, sobre nuestras familias tratando de permanecer juntas [y] hasta dónde llegamos para protegernos unos a otros y proteger el lugar donde vivimos». La inmortalidad.

El mito de La Batida del Océano de Leche es uno de los más importantes de los miles que existen en La India y muchos historiadores y expertos en religiones y mitologías, como el francés George Dumézil (1898-1986), lo han estudiado encontrando paralelismos sorprendentes. Dumézil realizó su tesis doctoral sobre este mito afirmando que su estructura se halla presente en todos los pueblos Indoeuropeos, desde La India hasta las culturas nórdicas y las clásicas como Roma: sacralidad, fuerza guerrera y fertilidad. Y tambien protagoniza la serie de películas, sobre todo esta segunda: sacralidad con la comunión espiritual con los Tulkum o el misticismo del que hace gala Kiri Sully; fuerza guerrera en el enfrentamiento entre los habitantes de Pandora y los humanos; y fertilidad representada tanto en la cría de Tulkum, como en la amplia familia Sully y el embarazo de Ronal, la líder de los habitantes del arrecife.

Del mismo modo, la Amrta la asimila a la Ambrosía clásica o al mito de las Manzanas de la Inmortalidad de Freya (diosa de la juventud, la belleza y la fertilidad) en la mitología germana. También al consumo ritual de una bebida espiritual, alcohólica o alucinógena, como sucede en algunos rituales chinos de la primavera o al Potlach alimenticio de los Indios de la Costa Noroeste de Norteamérica. Otros investigadores, como el lingüista alemán Heinrich Zimmer (1890-1943), consideran que lo importante no es la Amrta, sino el veneno Kâlakûta, que hace que al tragárselo Shivá, venza a la muerte. Otra forma de inmortalidad. En general, piensa que, bajo todos estos textos, existe una búsqueda universal, la del mito alquímico de la legendaria Piedra Filosofal. No solo se trataba de una sustancia capaz de convertir los metales básicos en oro (chrysopoeia), sino que también se creía que podría ser un elixir de la vida, útil para el rejuvenecimiento y, con ello, lograr la inmortalidad. O también la Fuente de la eterna juventud, mencionada por Heródoto, se me ocurre. ¿Por qué los humanos anhelamos la inmortalidad, la suerte de los dioses, y ellos suspiran por una vida mortal como la de los humanos hasta el punto de mostrarse entre nosotros como tales mortales? Todas las religiones y mitologías nos hablan de Dioses que se mezclan con los hombres en la Tierra ¿Y no fue hasta lo que hizo Jesús? Dejó un mensaje de vida eterna mientras él disfrutó de una existencia finita entre los hombres. ¡Dichosas e incomprensibles dualidades!

Claro que por debajo de todas estas interpretaciones subyace una que articula todo el mito y está presente también en las interpretaciones de los especialistas. No es otra cosa que la lucha entre Dioses y Demonios (Asuras), el bien contra el mal, la razón contra la irracionalidad y la violencia.

Otro día les cuento los mitos asociados al Soma, una planta y la bebida que se extrae de ella y que en los textos védicos, anteriores a las Epopeyas de las que he hablado, equivale a la Amrta, la bebida de los dioses, la enzima que portan los Tulkun en su cerebro y que proporciona la inmortalidad a los hombres. En ninguno de todos esos mitos, ni en sus interpretaciones, ni en las películas de James Cameron, se profundiza en la pregunta de si realmente Dioses, Asuras (Demonios) o los mismo hombres, se merecen tal don. Tal vez solo Pandora se lo planteó y por eso, guardó la esperanza en el rincón más recóndito de la caja.

Vean la película sin pensar en nada de esto. De verdad que es un prodigio de técnica y efectos especiales, de paisajes, música, fotografía… y de relaciones humanas (en el sentido peyorativo de la palabra, porque quienes más las demuestran no lo son). No se fijen demasiado en la historia ni en los diálogos, pienso que ahí flojea y repite estereotipos. Y en cuanto a las actuaciones, no sé si serán capaces de apreciarlas tras las figuras azules producto de los efectos CGI. Yo es que desde el Gollum de Andy Serkis y el Smaug de Benedict Cumberbatch, creo que habría que crear una nueva forma de llamar a esta forma de actuar, me parece todo un arte. E, incluso, soy partidaria de que habría que dotar una nueva categoría de Premios Oscar. ¡¡Me maravillan!!

Y sepan que todos ellos tuvieron que filmar bajo el agua conteniendo la respiración durante varios minutos. Los niños que actúan entrenaron durante seis meses para prepararse para las escenas submarinas. Trinity Bliss (Tuktirey «Tuk» Sully), que tenía siete años, consiguió, como la mayoría de los actores, aguantar cuatro minutos la respiración bajo el agua. Y aunque no se lo crean, Kate Winslet, en el papel de Ronal, una de los Metkayina, la esposa de su líder, que era la primera vez que trabajaba con la técnica de captura de movimiento e insistió en realizar todos los de su personaje, fue una de las que tuvo que aprender buceo libre para ello. Pero resultó ser la que más aguantó bajo el agua, 7 minutos y 14 segundos. Dio un susto tremendo al set, donde pensaron que le había ocurrido algo, pero batió todos los récords conocidos, superando incluso al temerario Tom Cruise en la película Misión imposible: Nación secreta (2001, Christopher McQuarrie). Cualquiera diría que tras Titanic (1997, James Cameron),  Kate se aseguró de no volver a perder a nadie bajo las aguas del océano, o que la inmortalidad de la Amrta que aguardaba en su seno a ser rescatada, la alcanzó durante el rodaje. ¿Quién sabe? ¡Es el sentido del agua!

AlmaLeonor_LP

La fuente principal par escribir este artículo son mis propios apuntes de la asignatura TIEMPO Y MITO EN LA INDIA que cursé hace ya muchos años en la Universidad de Valladolid, impartida por el profesor Enrique Gavilán. Fue una de las mejores clases a las que asistí durante la carrera de HISTORIA, y sigo disfrutándola cada vez que releo esos apuntes. Las demás fuentes están marcadas en los enlaces a lo largo del texto.

AlmaLeonor_LP

…Y DÍA DEL LIBRO

…Y DÍA DEL LIBRO

Este 23 de abril tiene la particularidad de ser doblemente festivo para mucha gente. Para los castellano-leoneses, además del Día de la Comunidad, de la que acabo de hablar, hoy también celebramos el DÍA DEL LIBRO, como se festeja en toda España.

El de hoy es un día para ellos, para los LIBROS, todos los libros, en todos los formatos, para niños, para jóvenes, para adultos, con imágenes, en audio o solo lectura… Todos los libros tienen el poder de la PALABRA, un poder que va más allá de su contenido. Hay libros que se pueden odiar y otros que se pueden amar, hay libros que ofrecen paz y otros que incitan a la guerra, hay libros que nos excitan la imaginación y otros que calman nuestra locura… Pero todos, todos ellos, son imprescindibles. La humanidad dio dos pasos importantes en los albores de su existencia, el primero con el LENGUAJE HABLADO y el segundo con el ESCRITO. Los libros son el recordatorio perenne de que somos seres sociales que necesitamos hablar, comunicarnos, contar historias y disfrutar de ellas.

¡¡GRACIAS A LOS LIBROS POR TANTO COMO OFRECEN!!

La primera obra que publiqué no fue un ensayo histórico, sino una novelita sobre un tiempo pasado y la añoranza de un cine que ya no se repetirá, entre otras cosas, porque las retinas de quienes lo disfrutamos ya no serán nunca las mismas. Se titula LAS ACTRICES FAVORITAS DE MI PADRE, y como toda obra primeriza, tiene sus fallos y sus carencias, algún día tendré que retomarla y actualizarla, pero hoy, para conmemorar este DÍA DEL LIBRO, se lo REGALO en formato PDF a quien me lo pida en comentarios… Solo tiene que dejar una dirección de correo electrónico y se lo mando. Si alguien lo quiere en papel, en Amazón está muy baratito y es igualmente gratuito en kindle.

¡¡FELIZ DÍA DEL LIBRO!!

MENÚ DE NAVIDAD

MENÚ DE NAVIDAD

En Navidad se puede comer de todo y lo que a uno no le guste se puede dejar en un ladito del plato. No obstante en el “Hit Parade” los que van a la cabeza en superventas son el Pavo y el Besugo, seguidos muy de cerca por el Cordero, que últimamente está pegando muy fuerte y ha subido tres puestos en la pasada semana.

El Pavo, sin ir más lejos (porque podríamos irnos a Varsovia, pero estamos muy bien escribiendo este libro en casa calentitos), se cocina de muy diversas maneras. La más usual es la más corriente, siguiéndole en dificultad las más complicadas, hasta llegar a una receta que es prácticamente imposible de realizar. Con el Besugo, por el contrario, pasa exactamente lo mismo.

Por ejemplo, y sin ir más lejos (porque acabamos de llegar a Varsovia y no es plan de marcharse ahora otra vez, con lo que cuestan los billetes), basta recordar a aquél sacrificado armenio que tenía cara de pavo y su mujer se le comió en Nochebuena.

Una manera muy absurda de hacer el Pavo es la siguiente: Se coge el Pavo, se le suena el moco con unos klinex y se le mete al baño de María. Conviene antes llamar a María no vaya a ser que no esté en casa porque haya ido a la peluquería o algo. Si el baño de María estuviera ocupado, porque ella también tiene derecho a ducharse y eso, se puede meter al Pavo en el bidet de algún conocido, siempre que éste sea de confianza y muy limpio. Mientras se caldea el Pavo, coloque en una sartén un tomate maduro, dos tomates verdes, un tómate lo que quieras que estás invitado, dos tomates gordos pelados, otro tomate igual de gordo sin pelar (que ya lo pelará cuando tenga tiempo, usted no se agobie) y un poco de salsa de tomate en su tinta.

Saque el Pavo y cuando el animal esté confiado creyendo que ya va a salir, vuelva a meterlo otra vez haciéndole una aguadilla. Añada a la sartén algunos tomates y espere una media hora. Transcurrido este tiempo saque al Pavo definitivamente del agua y tiéndalo en el suelo. Fricciónele con fuerza en el pecho practicándole la respiración boca a pico. En caso de que reaccione el muy canalla, intodúzcalo de nuevo en el baño de María sin más contemplaciones. Meta la sartén con los tomates al horno. Trocee a María en lonchas finas e introdúzcala en una cacerola de barro. Dore el Pavo en el asador a fuego lento. Saque los tomates del horno y júntelos con el Pavo. Saque a María de la cacerola y métala en su propio baño para que parezca suicidio y nadie le pueda echar a usted las culpas. Sirva todo muy frío acompañado de un vino del país.

Para cocinar el Besugo al horno se coge el Besugo por la cola, se le sacan los ojos, y se colocan en el árbol de Navidad. Se mete el Besugo en el horno y, una vez asado, se le vuelven a colocar los ojos en su sitio.

GOMAESPUMA
«Navidad con Orejas»

¡¡FELIZ NAVIDAD!!

GINOIDES: ROBOTS Y CIBORGS FEMENINOS DEL CINE

GINOIDES: ROBOTS Y CIBORGS FEMENINOS DEL CINE

En la anterior entrega, ROBOTS Y CIBORGS DEL CINE CLÁSICO, comenzamos hablando de Robby, el protagonista de Planeta Prohibido (1956, Fred M. Wilcox), quizá, el más emblemático de los robots cinematográficos. Pero hay que decir que el más famoso, recordado y popular es, sin duda alguna, María, el robot femenino de Metrópolis (1927, Fritz Lang), un robot que sorprendió por su sexo en un momento en el que en el cine fantástico no existían las mujeres más que como compañeras del héroe, algo que ha seguido sucediendo de forma habitual, al menos durante mucho tiempo.

La protagonista de la película, María (tanto en su aspecto humano como robótico), estuvo interpretada por la actriz Brigitte Helm, quien tuvo que enfundarse un traje metálico complicadísimo y muy molesto con el que sufrió lo indecible: el traje se calentaba en exceso con los focos del rodaje y se tuvo que hidratar a la pobre Brigitte con un sistema de refrigeración inventado al efecto, que contaba con un depósito de agua que servía a la actriz para beber con una pajita. Con el tiempo, la estética de la película, y en especial la de María y su traje robótico, se hizo tan popular que hoy está considerada como excepcional, atemporal y goza de la consideración de icono de modernidad

Tanto esfuerzo mereció la pena, pues se consiguió una película redonda, fue todo un acontecimiento en su época, uno de los más grandes filmes del expresionismo alemán y el primer filme considerado Memoria del Mundo por la UNESCO. Encumbró a su director, Fritz Lang, a lo más alto del séptimo arte, aunque provocó más de una discusión entre él y Thea von Harbou, su esposa entonces y autora del guion (junto a Lang) y de la novela de 1926 en la que se basaba. Ambos cónyuges discutían a menudo, tanto por sus distintas opiniones artísticas como por sus diferentes inclinaciones políticas, pues Thea simpatizaba con el nacionalsocialismo alemán y quería reflejar algunas de sus ideas en el filme, a lo que Lang, que odiaba todo lo que sonase a nazi, se oponía tajantemente, terminando por provocar la separación de la pareja.

El póster de la imagen de cabecera, creado en 1927 por el artista gráfico alemán Heinz Schulz-Neudamm, fue vendido en el año 2005 a un precio de 690.000 dólares, una cifra récord que no había alcanzado ningún cartel de película hasta el momento. En el año 2012 se anunció que se subastaría con un precio de salida de 850.000 dólares y se vendió finalmente por la cifra, récord de nuevo, de 1,2 millones de dólares (alrededor de 920.00 euros) ¿Quién lo ha comprado? Pues según The Hollywood Reporter, un coleccionista de la costa este de Estados Unidos de nombre Ralph de Luca. ¡Afortunado él!

La acción de Metrópolis se desarrolla en el año 2026, un futuro lejano en la fecha en la que fue rodada (recordemos que fue en 1927, casi cien años de diferencia) pero que hoy nos puede resultar inquietantemente cercana.

Con María comenzamos este recorrido por los ROBOTS Y CIBORGS FEMENINOS DEL CINE, también llamados en la ciencia reciente GINOIDES, una denominación adoptada más recientemente para diferenciar nominalmente a los androides femeninos de los masculinos, aunque hay que decir que la palabra “androide” se populariza a partir de una creación femenina, Hadaly, la protagonista de la novela La Eva Futura (1886) del francés Auguste Villiers de l’Isle-Adam. Y, en todo caso, creo que la palabra correcta debería ser “ginecoide”, el antónimo de androide, que ya tiene su explicación etimológica en el diccionario español: semejante a una mujer.

En fin… empezamos… Y ya que hemos mencionado La Eva futura, la novela de Villiers, vamos a hacerlo con otra EVA (Extraterrestrial Vegetation Evaluator, Evaluador de Vegetación Alienígena), la protagonista femenina de la película WALL-E (2008, Andrew Stanton). EVA no es un robot humanoide, tiene la complexión de un huevo, pero es femenina, de ojos azules (de LED) y, además, brillante, pulida y nuevecita, el contrapunto perfecto del protagonista, WALL-E, un robot bastante ajado y antiguo. La voz de EVA en el filme es de Elissa Knight (en España fue doblada por Mar Bordallo) y Sigourney Weaver presta su voz a la Computadora del Axioma (en España por Beatriz Berciano), también una computadora femenina en el filme.

También se llama así la primera película de robots producida en España, Eva (2011, Kike Maíllo), donde se trata de dar respuesta ética a la idoneidad de hacerle ver a un robot que es un robot… El ingeniero de la película, que se desarrolla en el año 2041 (no está tan lejos, ¿verdad?), trata de conseguir un robot capaz de superar cualquier prueba para detectar si es, o no, un robot. Aparecen distintos ejemplo, desde un gato hasta una arquetípica ginoide (robótica de servicio, dice), que es recepcionista en un edificio público. Muy típico y ¿machista? ¿Se puede aplicar el término machismo cuando hablamos de ginoides? Hay dejo la pregunta…

LAS MUJERES PERFECTAS

Me doy cuenta de que hasta ahora el guion robótico de este artículo puede leerse casi en clave bíblica: he hablado de María y de Eva. Ambas han estado consideradas a lo largo de la historia como la encarnación de la mujer perfecta, y el cine también ha creado sus mujeres perfectas… artificiales.

La mujer perfecta (1949, Bernard Knowles) es una comedia británica en la que un científico crea un robot femenino al que considera la mujer perfecta. Estaba interpretada por Patricia Roc, una mujer que, curiosamente, estaba considerada “la belleza británica arquetípica”, o sea, perfecta. Su vida pública, sin embargo, hubiese escandalizado a todo el puritanismo británico de posguerra, pero ella no permitió que trascendiera más allá de su imagen cinematográfica.

Se sabe, no obstante, que mantuvo varios romances a lo largo de su vida, tanto con hombres (incluyendo a Ronald Reagan, actor y posterior presidente de los EE. UU.) como con mujeres, algo que ella declaraba abiertamente ya entonces. Una mujer explosiva a la que la censura estadounidense, esta vez sí de verdad, exigió nuevas tomas retocando su escote en la película The Wicked Lady (1945). De este filme existe una versión de 1983, dirigida por Michael Winner y protagonizada por Faye Dunaway, en la que Glynis Barber interpreta a Caroline, el papel de Patricia Roc en la versión inglesa.

Pero si de mujeres (robóticas) perfectas se trata, no hay mejor ejemplo que Stepford wives (1975, Bryan Forbes), una película de terror basada en la novela de 1972 del mismo nombre de Ira Levin. La protagonista (Katharine Ross) es una mujer que se ha trasladado junto a su esposo a la ciudad de Stepford y descubre que las esposas de sus vecinos son todas ellas robots complacientes. Existe un remake, The Stepford Wives (2004, Frank Oz), con Nicole Kidman como protagonista, donde el terror se sustituyó por la comedia.

Este tipo de ginoides, mujeres perfectas como esposas sumisas, complacientes y hacendosas trabajadoras del hogar, puede recordarnos a lo que cuenta la mitología griega del dios Hefesto, el herrero lisiado y cojo, pero esposo de la bella Afrodita, que fabricó dos mujeres metálicas, de oro (las Kourai Khryseai o “doncellas doradas”), con movimiento propio, que le servían de “ayudantes”, aunque por las características del dios, más bien habría que decir esclavas, como las esposas de Stepford.

Pero una curiosa interpretación de estas “doncellas doradas” podemos encontrarla en las famosas fembots de Austin Powers: International Man of Mystery (1997, Jay Roach), las rubias (doradas) y seductoras ginoides femeninas que disparaban con sus pechos (¿quién no recuerda a Afrodita X, la compañera de Mazinger Z y su “pechos fuera”?). De hecho, la palabra fembot también es un término que se utiliza, incluso antes que el de ginoide, para hablar de un robot antropomorfo de aspecto femenino. Las fembots de Austin Powers fueron: Cheryl Bartel, Cindy Margolis, Donna W. Scott, Barbara Moore y Cynthia Lamontagne.

Los robots de la película Los sustitutos (2009, Jonathan Mostow), la adaptación de un comic que está ambientada en un futurista 2017 (cada vez se veía más cerca el futuro, ¿no?), van más allá de la perfección… Son capaces de absorber las funciones vitales de sus sustituidos, convirtiéndose en perfeccionistas imágenes de sí mismos capaces de satisfacer todas sus necesidades y caprichos. La protagonista, una Rosamund Pike inconmensurable, se abandona en estos sustitutos cibernéticos para huir de una gran pena. ¿La perfección es la ausencia de dolor?

GINOIDES Y SEXUALIDAD

La mayoría de las veces, la búsqueda de una mujer perfecta se refiere a una perfección sexual y el cine de robots se ha encargado de “fabricar” perfectas ginoides sexuales. También la televisión, de hecho fue pionera en este tipo de interpretación robótico-femenina. Por ejemplo, en los años sesenta, una serie de TV, My Living Doll (1964-65, Ezra Stone), dio a conocer a la perfecta y muy sexi mujer robótica humanoide, una mujer llamada Rhoda Miller (en realidad: proyecto AAF709), interpretada por la siempre magnífica Julie Newmar. «Mi muñeca viviente no es un robot«, dice el protagonista. Tampoco es una muñeca, digo yo…

El cine recogió el testigo con una mujer robot con apariencia totalmente humana y muy sexi, cuyo nombre da título a la película Galaxina (1980, William Sachs). En esta película, además de sexi y voluptuosa, la androide Galaxina es muy inteligente y logra reprogramarse a sí misma para ser más humana. Estuvo protagonizada la Playmate del año 1980 Dorothy Stratten, quien, tristemente, fue asesinada por su marido poco después del estreno.

Una curiosa película de ciencia ficción ambientada en un mundo postapocaliptico situado en el año 2017 (otra vez… ¡qué cosas!), Cherry 2000 (1987, Steve De Jarnatt), presenta una sociedad donde el sexo se concibe como una obligación rutinaria (¡¡qué cosas!!), pero los humanos, siempre avispados para estas lides, fabrican unos robots femeninos, dispuestos a, digamos, saltarse esa versión rutinaria del sexo. Como todos los filmes acaban siendo un “chico encuentra chica”, el protagonista se siente muy unido a su bella ginoide sexual (interpretada por Pamela Gidley) y cuando sufre un cortocircuito cree enloquecer porque no hay forma de arreglarla y tiene que ir a una zona peligrosa para encontrar los repuestos necesarios…

Y entonces contrata los servicios de una mujer de carne y hueso (¿ven como siempre somos más necesarias y eficaces?), la cazarrecompensas Edith “E” Jhonson, interpretada por Melanie Griffith, en una curiosa y poco conocida interpretación de la actriz.

Y la imponente Kelly LeBrock da vida a Lisa una ginoide perfecta y, desde luego, muy sexi, creada por dos adolescentes muy espabilados en la película La mujer explosiva (1985, John Hughes). Lo que pasa es que, como siempre, ellos confían en que su “creación” les obedezca en todo… ¡pobretes! no se daban cuenta que creaban una mujer.

Finalmente, la televisión ha vuelto a recuperar a las ginoides-mujeres perfectas (en realidad a hombres y mujeres) en la serie Humans (2015, Sam Vincent), una adaptación de la galardonada serie sueca Real Humans, que explora el impacto social y emocional que causa el difuso espacio que dibuja la delgada línea fronteriza entre humanos y robots con su misma apariencia (androides y ginoides). Gemma Chan es Anita/Mia, la synth (otro nombre para la colección) bella, protectora y maternal adquirida por Joe para que le ayude en las tareas domésticas… y para algo más.

GINOIDES HUMANOIDES

En realidad aún se discute la idoneidad de si los robots utilitarios deben tener apariencia humana o no. Es una cuestión ética que también ha llegado al cine, donde varias películas y series de televisión muestran una gran variedad de robots, ginoides o “sintéticos”, también femeninos, con apariencia totalmente humana, tanto, que es difícil diferenciar uno de otro.

Por ejemplo, y para continuar con las series de TV, tenemos que mencionar en primer lugar a Lindsay Wagner, la fantástica protagonista de La mujer biónica (1976), aunque más que una ginoide al estilo de las que llevamos mencionadas, es una especie de anticipo de Robocop, pese a que siempre se la ve con forma humanoide-femenina. Jaimie Sommers, que así se llamaba la protagonista de la serie, era una tenista profesional que tras un accidente en paracaídas queda discapacitada y fue convertida en un organismo cibernético con varias mejoras (oído ultrasensible, un brazo artificial de enorme fuerza y ambas piernas biónicas) que le permitían ser una supermujer de increíbles capacidades. No se quedaron ahí las aplicaciones científicas de la serie, porque en la tercera temporada, se revive a la protagonista (había fallecido al final de la segunda) o, mejor dicho, se explica que a Jaimie se la había sometido a un proceso criogénico en hibernación y seguía viva.

Otra serie de TV con robots femeninos y con aspecto totalmente humano, aunque en este caso productos sintéticos perfectos (también hay hombres, pero aquí y ahora hablamos de mujeres), es el mundo de Westworld (2016, Jonathan Nolan y Lisa Joy). Como saben, esta serie se inspiró en la película Almas de Metal (Westworld, 1973), de Michael Crichton, en la que el androide protagonista, un magnífico Yul Brynner, acaba “perdiendo la cabeza” y actuando por su cuenta. A esta película le siguió una segunda parte, Mundo futuro (Futureworld, 1976) de Richard T. Heffron, y una serie de televisión de corta duración titulada Beyond Westworld (1980).

En la moderna Westworld, dos de las principales protagonistas son mujeres: Dolores Abernathy (Wyatt), interpretada por Evan Rachel Wood; y Maeve Millay (Madam), a la que da vida una magnífica Thandie Newton. Ellas son unas ginoides muy sofisticadas que también acaban alcanzando conciencia.

Para sofisticación cibernética las de las mujeres que aparecen en las secuelas de Terminator, concretamente la T-X (interpretada por Kristanna Loken) de Terminator 3: Rise of the Machines (2003, Jonathan Mostow), más inteligente, fuerte y rápida de lo que ha sido cualquier exterminador hasta el momento.

En la última entrega (y parece que la definitiva), Terminator: Dark Fate (2019, Tim Miller), llega a un incierto pasado el Terminator Rev-9 (Gabriel Luna), muy avanzado, por lo que una soldado modificada en un ciborg (Mackenzie Davis), es enviada a su vez para ayudar a Sarah, porque John Connor ha muerto… Un momento… ¿no se supone que este es el intríngulis de toda la serie, que Connor siga vivo? Bueno, pues como nadie dio respuesta a esta cuestión, la película fue un fracaso en taquilla.

Pero sin duda, las ginoides, o mujeres robots con apariencia totalmente femenina, más famosas del cine son las replicantes (un nuevo palabro) de Blade Runner (1982, Ridley Scott). Ellas fueron Sean Young como Rachael y Daryl Hannah, como Pris. La película es toda una orquestación alrededor de esta pregunta: ¿qué es lo que nos hace humanos? Y queda inconclusa, o no, según cada uno lo vea. Para unos, los replicantes son más “humanos” que los propios habitantes no artificiales en un mundo futuro totalmente deshumanizado. Pero la cuestión se puede alargar hasta el infinito ¿serían capaces unos hombres deshumanizados de crear replicantes más humanos que ellos mismos?

En todo caso, entre los fans del filme corre desde su estreno la duda de si su protagonista, Deckard (Harrison Ford), era o no un replicante. Para complicar aún más la cuestión, Denis Villeneuve, el encargado de realizar la continuación, Blade Runner 2049 (2017), en la que también intervienen Ford (como Deckard) y Sean Young (como Raechel), no resuelve la cuestión y, además, hace que su protagonista, K (Ryan Gosling), sea un replicante (y hasta él lo duda) que actúa como Blade Runner atrapando replicantes obsoletos. En esta película también tiene un papel Mackenzie Davis, la ciborg de Terminator-4 que acabo de mencionar. Y no se si se han fijado, pero esta película se filmó en el 2017, el futuro de algunas de las películas que he mencionado…

Quiero terminar con una serie de películas y episodios televisivos emblemática, el mundo Star Trek. En una de las películas aparece una mujer que es, digamos, abducida por un ente cibernético y se convierte en su avatar corpóreo, por decirlo de alguna manera. Ella es Ilia, de Star Trek: La película (1979, Robert Wise), teniente de la Flota Estelar asignada a la Enterprise. Fue asesinada por una de las sondas de V’ger y, más tarde, su apariencia fue dada a otra sonda V’ger puesta a bordo del Enterprise para aprender sobre la “infestación” humana (¡vaya descripción, pardiez!) y destruirlos. Al final, se consigue detener el ataque a la Tierra y ella se termina fusionando con la V’ger, por lo que se convierte en un ente cibernético. La teniente Illia estuvo interpretada por Persis Khambatta, una actriz india que se afeitó la cabeza para el papel y alcanzó gran fama en Hollywood, aunque fue efímera. Murió muy joven, con 49 años, de un ataque al corazón.

La serie de TV StarTrek: Voyager (1995 y 2001), además de contar con una capitana femenina por primera vez en toda su historia, tiene también una semi-ginoide femenina, Seven of Nine, interpretada por la actriz Jeri Ryan. Es una humana que, dice la información de la serie, ha sido asimilada por un colectivo de ciborgs y aunque la tripulación la rescata, algo de ello queda en su fuerza y poderes sensoriales.

ROBOTS FEMENINOS

Habíamos conocido a Scarlett Johansson como producto sintético con apariencia totalmente humana (femenina) en la película La Isla (2005, Michael Bay), no era un robot ni nada parecido, pero artificial sí que era. Y como para dar réplica a esta indefinida situación, la misma Scarlett dio vida a Lucy (2014, Luc Besson) una mujer que merced al efecto de una droga sintética que introducen unos mafiosos en su cuerpo, es capaz de responder a la pregunta ¿qué es capaz de hacer el ser humano cuando usa el 100% de su capacidad cerebral? Ella se convierte en energía pura, un ser cibernético completamente etéreo, una presencia en la red.

Pero estas no son las únicas incursiones de Scarlett Johansson en el mundo de la ciencia ficción, también ha dado vida a un robot ginoide en Ghost in the Shell (2017, Rupert Sanders), donde interpreta a la mayor Mira Killian (la doble de acrobacias de Scarlett Johansson fue Rhianna Buchanan) un híbrido de ciborg y humana único en su especie, que dirige un grupo operativo de élite de operaciones especiales llamado Sección 9, en un Japón futurista. Fue un filme rodado con CGI y Weta Workshop se encargó de los efectos visuales en postproducción. Ghost in the Shell es la versión norteamericana de una película anime japonesa del mismo título dirigida por Mamoru Oshii en 1995, de la que DreamWorks y Steven Spielberg adquirieron los derechos para producir una adaptación cinematográfica del manga original.

En la misma línea encontramos a Ava (¡huy!, casi otra Eva), de Ex Machina (2015, Alex Garland) una ginoide (una androide, o fembot, o un robot antropomorfo femenino) con inteligencia artificial. Los efectos especiales estuvieron a cargo de la empresa Double Negative y fue rodada en imagen real, sin efectos visuales, croma o marcadores de seguimiento durante el rodaje. Está protagonizada por Alicia Vikander (María Blanco pone la voz a Ava en el doblaje en español), quien vestía un traje de neopreno gris, que es el que se ve en las partes que no se sustituyen por partes robóticas, todas incluidas en posproducción. La película ganó el Óscar a los mejores efectos visuales.

Otra película en el mismo estilo es Alita: Battle Angel (2019, Robert Rodríguez), igualmente basada en un manga, GUNNM, de Yukito Kishiro. Alita, la heroína ciborg, está interpretada por Rosa Salazar a través de la técnica de captura de movimiento y Simulcam. Estuvo muy bien acompañada por un reparto de lujo: Christoph Waltz, Keean Johnson, Jennifer Connelly, Mahershala Ali, Ed Skrein, Jai Courtney, Edward Norton, Michelle Rodriguez (como Gelda, una guerrera ciborg), Jackie Earle Haley (interpretando a Grewishka, un enorme ciborg) y Eiza González (como Nyssiana una asesina ciborg). Los efectos visuales estuvieron a cargo de Weta Digital (encargada de Alita), DNEG y Framestore.

Para terminar este bloque sobre ginoides con aspecto de robot, quiero recordar una maravilla, la Galatea (interpretada por Kiersten Warren) de El hombre bicentenario (1999, Chris Columbus), la robot femenina que da el contrapunto a ANDREW (el robot NDR-114) interpretado magistralmente por el recordado Robin Williams. Ambos fueron diseñados por EdgeFX de Steve Johnson. Al final de la película, Galatea y Andrew han adoptado una forma humana, digamos que cobran vida humana, como en el cuento de Pinocho (era un niño de madera), o como la estatua femenina (era de piedra) creada tan perfectamente por Pigmalion, que se enamora de ella y los dioses le conceden el don de la vida humana.

Quiero acabar ya con esta lista de ginoides, porque podría ser demasiado extensa, pero me gustaría dejar constancia de alguna presencia más, por ejemplo, la de Robotina, la asistente doméstica de la serie animada de TV, Los Supersónicos (The Jetsons, 1962-1963), y que visto lo visto, ha sido más ejemplo para el cine futuro del que nos imaginábamos. Junto a la ya mencionada Afrodita X, también de una serie animada, son los dos tipos de robots femeninos (o ginoides) explotados en el cine: el de la doméstica sumisa y esclavizada; y el de la guerrera voluptuosa y sexual.

Pero hay un modelo que no ha sido repetido, o al menos yo no lo conozco (más allá del niño de A.I. Artificial Intelligence, de Steven Spielberg), me refiero al de la serie Small Wonder (1985-1989), protagonizada por el robot V.I.C.I. (Voice Input Child Identicant) un androide con forma de niña de 10 años (interpretado por la actriz infantil Tiffany Brissette) creado como un proyecto personal y en absoluto secreto por un científico que trabaja para una empresa cibernética. ¿Se imaginan una serie de niños robot al estilo de Los chicos del maíz? Espero que a nadie se le ocurra…

VOCES ROBÓTICAS DE MUJER

También las voces pueden ser femeninas y en el mundo de la ciencia ficción, no lo iba a ser menos. La famosa película 2001: Una Odisea en el Espacio (1968, Stanley Kubrick), utilizaba una inteligencia artificial que ha sido un ejemplo a seguir en posteriores películas de ciencia ficción, me refiero a Hal9000. Curiosamente, este ente iba a contar con una voz femenina, la de Stefanie Powers, pero en el ultimo momento (la película estaba ya en montaje y postproducción), el director Stanley Kubrick decidió que la voz de Hal9000 debía ser la de Douglas Rain, un actor canadiense al que descubrió viendo un documental de la NASA (Universe, 1960). Así que aquella computadora no llevó finalmente una voz femenina por poco.

Sí que lo hizo la famosa computadora central de la nave Nostromo, la Madre, de Alien, el octavo pasajero (1968, Ridley Scott), tan poco protectora para con sus «hijos» a bordo de la nave, y a la que pone voz Helen Horton (en español se la prestó Gloria González).

También V.I.K.I. (con la voz de Fiona Hogan y en español de Lola Oria), el gigantesco cerebro positrónico (otro palabro más) de la película Yo, Robot (2004,  Alex Proyas)V.I.K.I es el ordenador central que dirige la compañía y domina a los robots asistentes de todo Chicago, quizá el ente femenino cibernético más poderoso de todos cuantos hemos hablado aquí.

Pero si hemos de mencionar una voz robótica femenina y que ha revolucionado el mundo del cine, esa es la de Samantha, el sistema operativo de la película Her (2013, Spike Jonze), creado con una voz tan dulce y seductora que su protagonista, un magnífico Joaquin Phoenix, se enamora perdidamente de “ella”. A Samantha le pone voz Scarlett Johansson (Inés Blazquez en el doblaje español), así que algo de razón tenía el pobre Joaquin. Recibió el Oscar al mejor guion original y no nos extraña nada, con frases como estas:

-“Estoy enamorado de ti”
-“Yo también de ti, y de los otros 6.237 señores que también me han comprado.”

Demoledor. Y curioso que no mencione a las señoras que la hubiesen comprado… ¿no se enamoró ninguna de «ella»? Es posible que no…

Hasta aquí el artículo dedicado a los robots femeninos (fembots, synt, sustitutos, ciborgs…) del cine, los llamados, GINOIDES, mujeres perfectas, juguetes sexuales, asistentes (o esclavas) laborales, guerreras, poderosos entes, seductoras voces, y también… ¿Inquietantes presencias reales hoy? Tanto China (primer vídeo) como Japón (segundo vídeo) se han empeñado en que no durmamos bien esta noche…

AlmaLeonor_LP

VIVIEN LEIGH

VIVIEN LEIGH

Vivien Leigh y Sus Perfumes ~ Columnas

LAS ACTRICES FAVORITAS DE MI PADRE

Y aunque parecía que su masculinidad solo era nominal cuando se casó con Bárbara [Stanwyck], sí que fue capaz de encontrar nuevos aires viriles con sus numerosas parejas de rodaje. Por ejemplo, con Vivien Leigh: actuaron juntos en 1938 y en 1940 sin que circularan rumores de romance entonces entre ellos ―y hubiese sido bastante improbable, siendo ella la esposa del que fuera su amante durante varios años estando él casado, el muy conocido e influyente Laurence Olivier―, pero Bárbara se refirió a ella muchas veces como «esa puta», por lo que sembró la duda de una infidelidad de [Robert] Taylor .

Vivien Leigh (Vivian Mary Hartley)
5 de noviembre de 1913 – 8 de julio de 1967

ORACIÓN POR MARILYN MONROE

ORACIÓN POR MARILYN MONROE

Imagen: Ira Tsantekidou

 

Señor
recibe a esta muchacha conocida en toda la tierra con el nombre de
Marilyn Monroe
aunque ése no era su verdadero nombre
(pero Tú conoces su verdadero nombre, el de la huerfanita violada a
los 9 años
y la empleadita de tienda que a los 16 se había querido matar)
y ahora se presenta ante Ti sin ningún maquillaje
sin su Agente de Prensa
sin fotógrafos y sin firmar autógrafos
sola como un astronauta frente a la noche espacial.

Ella soñó cuando niña que estaba desnuda en una iglesia
(según cuenta el Time)
ante una multitud postrada, con las cabezas en el suelo
y tenía que caminar en puntillas para no pisar las cabezas.
Tú conoces nuestros sueños mejor que los psiquiatras.
Iglesia, casa, cueva, son la seguridad del seno materno
pero también más que eso…
Las cabezas son los admiradores, es claro
(la masa de cabezas en la oscuridad bajo el chorro de luz)
Pero el templo no son los estudios de la 20 th Century-Fox.
El templo –de mármol y oro- es el templo de su cuerpo
en el que está el Hijo del Hombre con un látigo en la mano
expulsando a los mercaderes de la 20 th Century-Fox
que hicieron de Tu casa de oración una cueva de ladrones.
Señor
en este mundo contaminado de pecados y radioactividad
Tú no culparás tan sólo a una empleadita de tienda.
Que como toda empleadita de tienda soñó ser estrella de cine.
Y su sueño fue realidad (pero como la realidad del tecnicolor).
Ella no hizo sino actuar según el script que le dimos
-el de nuestras propias vidas- Y era un script absurdo.
Perdónala Señor y perdónanos a nosotros
por nuestra 20 th Century
Por esta Colosal Super-Producción en que todos hemos trabajado.
Ella tenía hambre de amor y le ofrecimos tranquilizantes
para la tristeza de no ser santos
se le recomendó el Psicoanálisis.

Recuerda, Señor su creciente pavor a la cámara
y el odio al maquillaje –insistiendo en maquillarse en cada escena-
y cómo se fue haciendo mayor el horror
y mayor la impuntualidad a los estudios.

Como toda empleada de tienda
soñó ser estrella de cine.
Y su vida fue irreal como un sueño que un psiquiatra interpreta y archiva.

Sus romances fueron un beso con los ojos cerrados
que cuando se abren los ojos
se descubre que fue bajo reflectores
¡y apagan los reflectores!
y desmontan las dos paredes del aposento (era un set cinematográfico)
mientras el Director se aleja con su libreta
porque la escena ya fue tomada.
O como un viaje en yate, un beso en Singapur, un baile en Río
la recepción en la mansión del Duque y la Duquesa de Windsor
vistos en la salita del apartamento miserable.

La película terminó sin el beso final.
La hallaron muerta en su cama con la mano en el teléfono.
Y los detectives no supieron a quién iba a llamar.
Fue
como alguien que ha marcado el número de la única voz amiga
y oye tan sólo la voz de un disco que le dice: WRONG NUMBER.
O como alguien que herido por los gangsters
alarga la mano a un teléfono desconectado.

Señor
quienquiera que haya sido el que ella iba a llamar
y no llamó (y tal vez no era nadie
o era Alguien cuyo número no está en el Directorio de Los Ángeles
¡contesta Tú el teléfono!

ERNESTO CARDENAL
(20 de enero de 1925 – 1 de marzo de 2020)

In memoriam
Resultado de imagen de ernesto cardenal

 

WHEELCHAIRS

WHEELCHAIRS

Ahora que ha terminado la afamada serie de HBO Juego de Tronos, hemos de coincidir en que dos de sus personajes más importantes, y desde luego de los más aplaudidos por todos los aficionados, presentan algún tipo de discapacidad: Peter Dinklage (interpretando a Tyrion Lanister, sin duda de los mejores personajes y actores de la serie) nació con acondroplasia, la causa más habitual de enanismo; y el personaje de Bran Stark (interpretado por Isaac Hempstead-Wright, un nombre mucho más difícil de recordar) necesita una silla de ruedas para moverse, silla  que, por cierto, le diseñó Tyrion. Pues bien, en este artículo sobre sillas de ruedas vamos a conocer a algunos personajes más que la han necesitado en un papel cinematográfico.

Antes de hablar de personajes ficticios que han aparecido en la gran pantalla (o en la pantalla chica) en silla de ruedas, me gustaría hablar de un actor que se vio abocado a utilizarla debido a un accidente que le produjo una tetraplejia severa. Me refiero a Christopher Reeve (1952-2004), el primer y más carismático Superman del cine al que, el 27 de mayo de 1995, una caída desde el caballo que montaba le causo la fractura de dos vértebras cervicales y le seccionó la médula espinal. Después de varias operaciones y de permanecer seis meses en un centro de rehabilitación, sólo pudo recuperar la movilidad de los dedos de su mano izquierda y necesitaba respiración asistida. “Village of the Damned” (1995), dirigida por John Carpenter, fue su última película antes del accidente, después, en 1997, dirigirá un filme para TV “In the Gloaming” y al año siguiente protagoniza “La Ventana de Enfrente”, junto a Daryl Hannah, un remake del clásico de Alfred Hitchcock. También participó en diversos programas televisivos y en algunos episodios de series de TV, como en dos capítulos de la  serie “Smallville”, interpretando a Virgil Swann, un científico que le dio a Clark Kent (Tom Welling) claves sobre su verdadero origen. Fueron los dos episodios con mayor audiencia de toda la serie. En marzo de 1996 Christopher Reeve apareció en su silla de ruedas en la ceremonia de los Oscars, donde pidió a la industria cinematográfica que dedicara un poco más de tiempo y esfuerzos para prestar más atención a los problemas sociales en que se encuentran miles de personas. La ovación de los asistentes fue apoteósica.

Reeve había colaborado desinteresadamente en varias causas sociales relacionadas con el medio ambiente y con el apoyo a discapacitados y personas con parálisis desde el inicio de su carrera. Proyectó su fama hacia la visibilización de estos problemas y contribuyó económicamente en muchas de esas instituciones, como también en las Olimpiadas especiales. Después de su accidente, él y su esposa refundaron la “Fundación Americana de Parálisis”, con el nombre de Christopher and Dana Reeve Foundation, dedicándose a un amplio programa que incluye desde el cultivo de células madre a la ayuda a las personas con paraplejia o tetraplejia, ya sea por causas naturales o por accidentes. La fundación trabaja también para mejorar la calidad de vida de las personas que viven con discapacidades. El actor asumió la presidencia de la fundación y durante el resto de su vida se dedicó a ampliar sus funciones y su programa de becas.

Resultado de imagen de “The Brooke Ellison Story”

A principios del 2004, dirigió la película “The Brooke Ellison Story” para la televisión, sobre la vida real de Brooke Ellison, la primera persona  tetrapléjica que se gradúa en la Universidad de Harvard, y en la que su esposa participó como una de las protagonistas. En octubre de ese mismo año, una infección por sepsis se agrava con la administración de un antibiótico y sufre un ataque cardíaco que le deja en coma, falleciendo al día siguiente. En esos momentos codirigía el filme animado “Everyone’s Hero”, que fue estrenado en el 2006, dos años después de su muerte y el mismo año en el que, en marzo, fallecía su esposa Dana víctima de un cáncer de pulmón. La fundación que crearon ambos sigue vigente en la actualidad.

Películas con protagonismo de una discapacidad hay muchas, muchísimas, y no pretendo aquí hacer una lista exhaustiva. Me gustaría, eso sí, recoger algunas que a mí me parece que deben ser reseñadas por uno u otro motivo. Por ejemplo, aquellas que hacen referencia a soldados que vuelven del frente necesitando una silla de ruedas. De la Primera Guerra Mundial habla Lucky Star” (1929), película muda (se distribuyó en los EE.UU. una versión sonora, aunque con poco diálogo, pero se ha perdido), de  Frank Borzage. Estaba protagonizada por Charles Farrell, y cuenta la historia de un hombre que regresa del frente confinado en una silla de ruedas y lucha por el amor de su antigua novia, papel que interpreta Janet Gaynor. De la Segunda Guerra Mundial es memorable la película The Men” (1950),  de  Fred Zinnemann, protagonizada por un debutante Marlon Brando al que acompaña Teresa Wright. La película hace un recorrido por los problemas de superación de Brando y otros soldados que han sufrido algún tipo de discapacidad durante la guerra.

Pero, sin duda, es de la Guerra de Vietnam de la que más veces hemos visto sillas de ruedas en el cine. La vimos en El regreso” (1978), de Hal Ashby, protagonizada por John Voight y Jane Fonda, que obtuvieron sendos reconocimientos a su interpretación: Voight en el Festival de Cannes y Fonda el Globo de Oro. También en El Cazador” (The Deer Hunter, 1978), la gran película de Michael Cimino protagonizada por Robert de Niro, aunque el que usa la silla es John Savage y quien se llevó el Oscar a la mejor interpretación fue Christopher Walken. La vimos en Forrest Gump” (1994), de Robert Zemeckis, con un inconmensurable Tom Hanks salvando al Teniente Dan (Gary Sinise) de morir en el frente y de morir de desesperación y abatimiento una vez de vuelta a casa recluido en una silla de ruedas. Tanto The Deer Hunter, como Forrest Gump, están consideradas «cultural, histórica y estéticamente significativas» por la Biblioteca del Congreso de Estados Unidos y seleccionadas para su preservación en el National Film Registry. Y la vimos, finalmente, en Nacido el 4 de Julio” (1989), de Oliver Stone, con un entregado Tom Cruise.

Otras veces las sillas de ruedas son “aparatosos” artefactos que acompañan a un “aparatoso” protagonista. Por ejemplo, la que se puede ver en Wild Wild West” (1999), de Barry Sonnenfeld, y que utiliza el inválido doctor Arliss Loveless (Kenneth Branagh). En la película Doom” (2005), de Andrzej Bartkowiak, uno de los protagonistas utiliza una extraña silla de ruedas de gran movilidad que, sin embargo, no le sirve de gran cosa… y acaba convertido en “cosa” en silla de ruedas. Y en la película Alien: resurrección” (1997), de Jean-Pierre Jeunet, cuarta de la serie, y la peor de todas pienso yo, uno de los protagonistas, Vriess (Dominique Pinon) también ocupa una extraña y bastante equipada armamentísticamente, silla de ruedas.

Encontramos sillas de ruedas también en mundos fantásticos, como la silla del Profesor Xavier de los X-Men, utilizada tanto por Patrick Stewart como por James McAvoy. Y, por cierto, McAvoy protagoniza otra película, Glass” (2019), de M. Night Shyamalan, con un inquietante personaje en silla de ruedas, Elijah Price, interpretado por el incombustible Samuel L. Jackson‎, personaje que hizo su primera aparición en El Protegido” (2000).

Otro mundo fantástico donde encontrar una silla de ruedas es el creado en la película Gattacca” (1997) de Andrew Niccol, donde un inválido, Jerome, interpretado por Jude Law, propone a Vincent (Ethan Hawke), un ser “menor”, intercambiarse para tener más oportunidades en la vida. Y hablando de oportunidades… ¿Qué me dicen del personaje interpretado por Sam Worthington en Avatar” (2009) de James Cameron? El inválido Jake Sully se convierte en un intrépido guerrero Na’vi, gracias a su avatar del planeta Pandora.

Sorprendentemente en la serie James Bond hemos visto varias sillas de ruedas. Desde una convertida en arma mortífera, fabricada por El Doctor Q (Desmond Llewelyn) en GoldenEye” (1995), de Martin Campbell, junto al Bond de entones, Pierce Brosnan; hasta otra en la que vemos trasladar a un noqueado Daniel Craig en Casino Royale” (2006), del mismo Campbell. Pero el más carismático ocupante de una silla de ruedas en la serie Bond es el personaje de Ernst Stavro Blofeld, el malvado villano que aparece en nada menos que seis películas de la saga (protagonizado por diversos actores, desde Donald Pleasence hasta Christoph Waltz, pasando por Telly Savalas, Charles Gray y otros actores que pusieron cuerpo y voz, incluso se dice que Max Von Sydow lo interpretó una vez) como el oscuro jefe de la organización criminal mundial SPECTRE. En For Your Eyes Only” (Sólo para sus ojos, 1981), de John Glen, el Bond protagonizado por Roger Moore, arroja al malvado Blofeld a una chimenea desde un helicóptero con su silla de ruedas y todo. A modo de parodia, el Dr. Evil de la serie de películas Austin Powers, interpretadas por Mike Myers, también utiliza una extraña silla de ruedas ocultas.

Y para no dejar de lado completamente a los malvados malos de las películas, no quiero dejar de mencionar al terrorífico Chucky Lee Ray, que vuelve en La Maldición de Chucky” (2013), de Don Mancini, la sexta entrega de la serie, mortificando a Nica Pierce (Fiona Dourif), una joven en silla de ruedas.

Vamos a ir terminando con dos de mis personajes favoritos en silla de ruedas. Primero, Peter Sellers, el Dr. Strangelove de ¿Teléfono rojo? Volamos hacia Moscú (1965), el icónico filme de  Stanley Kubrick y en el que Sellers interpreta nada menos que tres papeles distintos: además del inválido Strangelove, el del Presidente de los EE.UU., Merkin Muffley y el capitán de la Real Fuerza Aérea británica (RAF), Lionel Mandrake.

Y no, no me he olvidado de la película mencionada antes, La Ventana Indiscreta” (1954) de Alfred Hitchcock, donde un James Stewart accidentado y con un aparatoso escayolado en una pierna, termina con las dos escayoladas por el desarrollo de una historia en la que se ven envueltos desde su novia, la bella Grace Kelly, hasta su terapeuta, Thelma Ritter, y, por supuesto,  el malo malísimo de la película, Raymond Burr. Con este último vamos a hablar de sillas de ruedas en series de televisión.

Ironsidefue una exitosa serie de televisión de los años sesenta-setenta (emitida por la NBC del 14 de septiembre de 1967 al 16 de enero de 1975, un total de 199 episodios), protagonizada por un asesor externo de la policía de San Francisco, el exjefe de detectives Robert T. Ironside, interpretado por Raymond Burr (quien ya era muy conocido por la exitosa serie de policías y jueces “Perry Mason”, emitida de 1957 a 1966), tras verse obligado a renunciar a su puesto al quedar paralítico en un acto de servicio. Tuvo un éxito tremendo en su momento, tanto que hasta se hizo una película, “The Return of Ironside(1993), que pretendía ser el episodio piloto para el regreso del asesor policial a la pequeña pantalla. Pero Burr estaba ya enfermo de cáncer y no pudo rodar más. Fallecía en septiembre de ese mismo año, acompañado por quien había sido su pareja durante mucho tiempo, Robert Benevides.

Y desde el año 2012 contamos con Caïn, una serie francesa (en España se ha visto este año) protagonizada por el capitán Fred Caïn, un policía de Marsella, cínico e inteligente, que realiza su trabajo en silla de ruedas debido, como en el caso de Ironside, a una herida de bala en acto de servicio. Creada por Bertrand Arthuys está protagonizada por un famoso actor de teatro y televisión francés, Bruno Debrandt.

Pero en televisión hemos visto a otros actores interpretar un papel en silla de ruedas. Desde Bran Stark mencionado al inicio de este artículo, a otros como por ejemplo, Steve Kearban (interpretado por Craig Lamar Traylor), que en la serie Malcolm in the middle es el mejor amigo de Malcolm. En la exitosa serie Mom, desde la tercera temporada, aparece  en silla de ruedas Adam Janikowski, un exdoblador de cine, novio de Bonnie, que está interpretado por William Fichtner. También en las series de dibujos animados podemos encontrarnos con un personaje en silla de ruedas, como por ejemplo, Joe Swanson, de la serie American Dad, un personaje de Peppa Pigy otro de South Park, Timmy Burch. 

Pero el personaje más recordado por todos será, sin duda, Clara, de la serie infantil de los setenta, Heidi

Para terminar, quiero recordar algunos personajes “ocasionales” que han aparecido en algunas películas con una silla de ruedas y que merecen, al menos, una mención. Por ejemplo, Billy Black, de la saga Crepúsculo, de Catherine Hardwicke, interpretado por Gil Birmingham que se ve en silla de ruedas a causa de la diabetis; el capitán Pike (Bruce Greenwood) de la película Star Treck” (2009), de J.J. Abrams, aparece en silla de ruedas tras ser atacado por los romulanos y ser rescatado por el joven Kirk (Chris Pine). Algunos fans han encontrado anacrónico utilizar una silla de ruedas en un futuro tan lejano, pero no es el único caso… existen otras sillas de ruedas en el universo Star Treck; también podemos ver una silla de ruedas en una película del sin par Jackie Chan, Duro de matar” (1995), la utilizada por un niño al que Chan protege, interpretado por Morgan Lam; Y también la silla de ruedas de la abuela de la entrañable Coco” (2017), la película animada sobre la festividad mexicana del día de difuntos dirigida por Lee Unkrich.

Uno de mis personajes favoritos, y el último de esta recopilación, es el de la señora Muriel Donnelly, interpretado por la gran Maggi Smith en la película El exótico Hotel Marigold” (2012) de  John Madden. Otro día hablamos de las sillas de ruedas en personajes reales de la Historia.

AlmaLeonor_LP

 

WHEELCHAIRS EN LA HISTORIA

 

FRASES CON IMÁGENES (LXXXVII)

FRASES CON IMÁGENES (LXXXVII)

Imagen: Jurga Martin

La risa es el consuelo de la Humanidad, la caricia del espíritu, el eco de la buena consciencia, la expansión de la juventud, la música que brota del alma, al calor que rompe el hielo, la vida, la salud, la libertad, la dicha; todo lo bueno se refleja en la risa.

José Isbert (1886-1966)

KIM NOVAK (13-02-1933)

KIM NOVAK (13-02-1933)

LAS ACTRICES FAVORITAS DE MI PADRE

Picnic, que vi con mi padre al menos un par de veces cuando ya era adolescente ―después la he visto varias veces más, es una de mis preferidas―, era una película que él ya conocía bien, pero nunca contaba lo que venía después, como sí solían hacer mi abuela o mi madrina con la novela de la radio. No. Mi padre solo hacía algún gesto ―se removía en el sillón, se llevaba la mano a la cabeza atusándose el pelo nerviosamente, cosas así― que evidenciaba que iba a ocurrir algo, quizá grave, quizá erótico o escabroso, o que iba a aparecer un bello plano de una de sus actrices favoritas.

Porque Kim Novak lo era ―aunque fuese rubia la mayor parte de las veces en sus filmes, «un rubio diferente al de otras», decía mi padre― y en esa película rezumaba un erotismo casi impropio de la época en la que fue rodada y sonrojante, como poco, en los años en los que yo la vi con él, a principios de los setenta. Hace mucho de eso, pero se me quedaron grabados en la memoria los momentos en los que mi padre más se removía en su asiento. Por ejemplo, con aquel baile en el que el antihéroe por excelencia, William Holden (William Franklin Beedle Jr) y Kim Novak, vivían una pasión prohibida al son de la música. Holden fue mi prototipo de hombre favorito desde entonces. Lo sigue siendo.

AlmaLeonor_LP

KIM NOVAK
(Marilyn Pauline Novak)

AVA GARDNER, LA ANDALUZA

AVA GARDNER, LA ANDALUZA

LAS ACTRICES FAVORITAS DE MI PADRE

«…Ava Gardner… ―y este nombre, sorprendentemente, sí que le pronunciaba bien―, esa sí que era una mujer… morena, con cuerpo, con humor… una mujer sabia, andaluza, de las que quedan pocas…
― Pero papá… ¿no te pueden gustar más las actrices rubias como a todo el mundo? ¡Y Ava Gardner no era andaluza…!
― Pero le gustaba Sevilla más que a los sevillanos…»

AlmaLeonor_LP


Ava Gardner
(24 de diciembre de 1922 – 25 de enero de 1990)

A %d blogueros les gusta esto: